El mejor ejemplo de cómo otros reflejos se pueden ver afectados por la presencia de reflejos primitivos sin inhibir se encuentra en el reflejo del estapedio.
El estapedio es un músculo del oído medio que mueve el estribo y es el músculo más pequeño del cuerpo humano.
Cuando hay un ruido fuerte el músculo del estapedio junto con el músculo del tímpano aumentan la rigidez de la cadena de huesecillos disminuyendo la frecuencia con la que el sonido entra en el oído interno para protegerle de los ruidos fuertes.
A este mecanismo se le conoce como reflejo del estapedio.
Este reflejo empieza a funcionar a entre el tercer y cuarto mes de vida del neonato justo cuando empieza a inhibirse el reflejo de Moro.
La hipersensibilidad auditiva que se observa en muchos niños y adultos puede tener como causa que todavía tienen un reflejo de Moro activo que ha impedido que se desarrolle por completo el reflejo del estapedio dejándole sin protección contra los ruidos fuertes.
También puede ser un factor que considerar en niños anormalmente tímidos y que evitan situaciones donde hay ruidos fuertes: globos que pueden explotar, fuegos artificiales, ferias, supermercados, etc.
