El reflejo tónico simétrico del cuello reaparece hacia los ocho meses de edad cuando el niño se está preparando para gatear. Cuando coloca la cabeza en extensión se produce una extensión de los brazos junto con la flexión de las piernas. Cuando coloca la cabeza en flexión se produce una flexión de los brazos junto con la extensión de las piernas, tal y como ha sido descrito por Gallahue y Ozmun.
Si el reflejo no se inhibe le impedirá desarrollar la coordinación de brazos y piernas necesarias para el gateo, y en su lugar desarrollará formas anómalas de desplazamiento como el conejeo, el óseo o el culeteo. También ayuda al niño a levantarse desde la posición de sentado y ponerse de pie según Bender.
El reflejo tónico simétrico del cuello cumple una serie de funciones que han sido definidas por autores como Righard en 1990, quien mostró que, si colocamos al recién nacido sobre la barriga de su madre durante la primera hora justo después de nacer, espontáneamente empezará a subir hacia el pecho para empezar a mamar. Este falso gateo estará presente sólo durante una semana tras el nacimiento para reaparecer después antes de la etapa de inicio del gateo.
El reflejo ayuda según establece Goddard Blythe en 1990, al desarrollo de la acomodación visual. Cuando el niño flexiona la cabeza y se le flexionan los brazos los ojos tienen que enfocar en distancia de cerca. Cuando la cabeza se extiende, los brazos se extienden y las piernas se flexionan, los ojos enfocan la distancia de lejos. Durante la etapa de gateo se entrenará la habilidad para cambiar de lejos a cerca. Walk pudo comprobar en 1961, cómo durante esta etapa se desarrolla la percepción de profundidad del niño.
Gatear también ayuda a integrar el funcionamiento del sistema visual, el sistema vestibular y el sistema propioceptivo en una nueva relación con la gravedad que afectará al desarrollo del equilibrio, la postura y la percepción visual.
¿Qué sucede si no se ha inhibido el Reflejo Tónico Simétrico Cervical?
Si el reflejo no está inhibido afectará fundamentalmente a la postura, de forma que un cambio en el movimiento de la cabeza influirá en el tono muscular del tren superior e inferior del cuerpo y modificará tanto la postura como el paso e incluso la posición de sentado.
La posición de la cabeza afecta además al control de los brazos y de la mano lo que afectará al control de la coordinación ojo mano, además de la atención y la concentración propio de la falta de control postural.
Si el reflejo no está inhibido afectará fundamentalmente:
- Tendencia a dejarse caer cuando se sientan.
- Andar desaliñado como un mono.
- Posición de las piernas en W cuando se sientan en el suelo.
- Mala visión binocular y acomodación.
- Lentitud al copiar.
- Dificultad para aprender a nadar.
- Déficit de atención cuando están sentados por incomodidad.
